jueves, 28 de febrero de 2013

La máquina del tiempo

En nuestro mundillo, el del atletismo amateur, y digo amateur pues eso de popular me parece un vocablo clasista inventado por el pequeño gueto de la élite, si alguno de nosotros nombra la máquina del tiempo, enseguida pensamos en un cronómetro.

En cambio yo pienso en aquel invento de la peli de Regreso al futuro de Michael J. Fox.

Esta semana, le pregunté a mis hijos, mientras comíamos, qué harían ellos si tuviesen una máquina que les llevase a otros sitios u otras épocas.
 
- Uno de ellos contestó que ir a ver a Jesús.

- El otro que meterse en el Ferrari de Fernando Alonso.

- Llegado mi turno de uso de la máquina, les dije a los futuros atletas amateurs, que yo teclearía los datos para que me transportase a Tokyo, concretamente al 18 de octubre de 1964. Aquel día se disputó, bajo la lluvia, uno de los últimos 50 km marcha olímpicos a la vieja usanza, caminando, como se había hecho hasta ese momento durante siglos.
  
En uno de mis debates en los foros de marcha, me decía hace meses un directivo profesional de la especialidad a nivel internacional, en contestación a alguna de mis impertinencias sobre la esencia de la marcha, que le explicase qué era eso de la esencia.

Mis hijos, esos que quieren robarme la máquina del tiempo para sus rollos, lo tienen claro: marchar es caminar rápido. Vamos, la esencia de la marcha atlética. Caminar todo lo rápido que se pueda.

En caso de dudas sobre la definición de esencia de la marcha, pinchar aquí:
www.youtube.com/watch?v=gfbDrn9RPdE






2 comentarios:

  1. Estoy muy de acuerdo con lo de utilizar amateur en vez de "popular". Nunca me ha gustado lo de "popular", me suena a "populacho", a ver si se me pega lo de amateur y lo utilizo más.
    Sigue ahí defendiendo la esencia de las cosas. Yo si tuviera una máquina del tiempo volvería al instituto. Con lo que sé ahora me las iba a pasar a todas por la piedra, je, je.

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